Aquí tan lejos
No me hablas, no te hablo, bien sencillo (8)...
Y se me escapa el corazón, se agita fuerte y mi vientre quiere bailar, pero no esta dispuesto a moverse sólo, él prefiere morir entre tus caricias, porque ya no sólo mi mente te necesita, es una cosa de cuerpos, de células, algo que se alza desde los pies hasta la sonrisa, se erizan los pelos y llego a la conclusión de que te necesito, aquí. Cambiaría una habitación llena de cosas por un paseo junto a ti por un lugar en blanco, vaciaría mi mente para dedicarme a ser junto a ti, para llenarme de caricias y olvidar los golpes que el suelo me ha dado. Aquí tengo una risa que te espera, que pretende verte hasta agotarse, unos ojos que se gasta y pese a ello te siguen viendo, te conozco tanto que no necesito verte pero de pensar que no te volveré a ver el vientre se agita, tiembla y ya no se siente bien, se siente expuesto, quedo con los ovarios y el útero en mis manos. Así se hace difícil dormir, me siento dominada por el deseo de tomarte entre mis brazos y ya no dejarte ir, de hacerte prisionero del aire sucio que expulsan mis pulmones. Pero aquí estoy, lejos y llena de ganas. Quisiera entrar al juego de escapar, o al de ser raptada, no volver a dar explicaciones, ni a mí, ni al tiempo, ni a nadie. Que se mueran las ataduras del cuerpo y las responsabilidades del espacio, quiero viajar en el infinito, atravesar todas las fronteras que se interponen entre nosotros, las fronteras de cada poro, de cada partícula, quiero hacerle un nudo a todos los átomos que me alejan de tu piel.
Y se me escapa el corazón, se agita fuerte y mi vientre quiere bailar, pero no esta dispuesto a moverse sólo, él prefiere morir entre tus caricias, porque ya no sólo mi mente te necesita, es una cosa de cuerpos, de células, algo que se alza desde los pies hasta la sonrisa, se erizan los pelos y llego a la conclusión de que te necesito, aquí. Cambiaría una habitación llena de cosas por un paseo junto a ti por un lugar en blanco, vaciaría mi mente para dedicarme a ser junto a ti, para llenarme de caricias y olvidar los golpes que el suelo me ha dado. Aquí tengo una risa que te espera, que pretende verte hasta agotarse, unos ojos que se gasta y pese a ello te siguen viendo, te conozco tanto que no necesito verte pero de pensar que no te volveré a ver el vientre se agita, tiembla y ya no se siente bien, se siente expuesto, quedo con los ovarios y el útero en mis manos. Así se hace difícil dormir, me siento dominada por el deseo de tomarte entre mis brazos y ya no dejarte ir, de hacerte prisionero del aire sucio que expulsan mis pulmones. Pero aquí estoy, lejos y llena de ganas. Quisiera entrar al juego de escapar, o al de ser raptada, no volver a dar explicaciones, ni a mí, ni al tiempo, ni a nadie. Que se mueran las ataduras del cuerpo y las responsabilidades del espacio, quiero viajar en el infinito, atravesar todas las fronteras que se interponen entre nosotros, las fronteras de cada poro, de cada partícula, quiero hacerle un nudo a todos los átomos que me alejan de tu piel.
1 comentario:
Hola me llamo Igor, para los amigos del arte ighor, asi que tu seguro me dirás Igor.
Cada vez que me detengo a pensarte, en uno de esos espacios tiempo en los que nos alejamos por nuestras "obligaciones" me doy cuenta de lo exquisitamente fantastica que es nuestra relación, más allá de lo sentimental, de lo emocional, de todo eso que podría llamarse cursimente, cursi. Me doy cuenta de que cada vez que retomamos nuestro camino en un apretar de manos siento como recorre por mi cuerpo la misma sensación de akella en ke capturaste mi mano para no dejarla ir. Me doy cuenta de todo el vacío que siente mi cuerpo al encontrarse lejos del tuyo.
Hay segundos en los que mirandote a los ojos veo como se abre ante mi tu mundo, y doy gracias por ello, te doy gracias a ti por ello.
Quisiera ahora en este instante poder apretarte contra mi pecho y sentir como se mezclan nuestros adns en un tercero, ese que revivimos cada vez que el devenir nos permite disfrutar, jugar, llorar y hasta extrañarlo cuando no se puede.
Daniela Carolina Durazno Polilludo, te amo, más allá de lo que siento, eres mi adicción perfecta.
Publicar un comentario